Quisiera que la herida cicatrice finalmente, para poder palparla con el índice y sentir que ahí encerrado quedó el llanto y la desesperación.
Quisiera tener la fuerza para seguir adelante por mi propio pie y no sentir que la corriente me arrastra y me hace pasar los días uno a uno sin sentirlo.
Quisiera pausar esta película hasta encontrar un nuevo guionista, uno que saque lo mejor de mi histrionismo y me haga sonreír y disfrutar.
Quisiera esperar con alegría el momento de levantarme de la cama para salir a la vida para ser yo.
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