lunes, 3 de agosto de 2009

how could you?

Cómo pudiste?
Me pregunto una y otra vez.
Cómo pudiste?
Cómo?
Cómo?
Nosotros estábamos ahí
(AHÍ, entendés, AHÍ)
y vos tenías tu pensamiento
tan TAN lejos.
Cómo pudiste?
Cómo?
Cómo?
Estábamos al borde del precipicio
(al borde, entendés, al borde)
y vos no sólo te tiraste de cabeza,
sino que me arrastraste a mí y a todos.
Cómo pudiste?
Cómo?
Cómo?
Te prometo
habías dicho.
Es la última oportunidad
habías dicho.
Por favor
habías dicho.
Yo te amo
habías dicho.
Cómo pudiste?
Cómo?
Cómo?
Me arrastre por el piso
(por el piso, entendés, por el piso)
llorando y pidiendo.
Sólo la verdad, nada más.
Y a pesar de todo terminé aflojando:
porque sos bueno,
porque tenemos planes,
porque me aburre estar peleada,
porque se me enfrían los pies en la cama.
Pero no me sirvió de nada
(de nada, entendés, de nada)
porque lo único que gané fue este nuevo dolor.
Cómo pudiste?
Cómo?
Cómo?

No hay comentarios.: