A quién puede ocurrírsele calcular la cantidad de azulejos que necesita para su cocina en papelitos de sugus rojos? Si voy a la casa de materiales y le pido: dame tresmilochocientoscuarentaytres palitos de la selva lineales de ladrillos, seguro se van a reír en mi cara, no?
Sin embargo no resulta descabellado para cierta gente hablar de imagenes que representen *universalmente* los sentimientos, cuando resulta prácticamente imposible hacerlo sin caer en los estereotipos culturales que a lo largo de nuestra vida nos han impuesto. Universalizar es imposible a menos que pretendamos uniformar y la belleza de la vida está justo en la diversidad.
Nada puede desteñirse de la subjetividad de nuestro propio ombligo llenando de pelusa aquello que observamos. Yo estoy mirando esta realidad y te la estoy mostrando (con mis palabras, con mi fotografía, con mi música, con mi pintura, con el medio de expresión que más cómodo me resulte) como yo la veo. Sin embargo al observarla, vos, con tu propia subjetividad la teñis, la reinterpretas, la masticas y la cargas te tu propia historia. En ese proceso, lo que yo vi se transforma en lo que yo te mostré y nuevamente cambia en lo que vos viste dentro de lo que yo te mostré.
Aunque busquemos puntos en común que nos permitan reconocernos como humanos globalizados, siempre (SIEMPRE) es más interesante ver a la oveja que se aparta del rebaño y te dice "hey, hay otra realidad, vení, mirá".
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