miércoles, 14 de abril de 2004

boots

bootsDebo tener algo fetiche con las botas.

No no piensen mal, mi debilidad son las botas, no las fustas ni los trajes de cuero.
Me gustan y no puedo dejar de mirarlas. Cada vez que voy a una zapatería o paso por una vidriera me detengo y las miro embobada.

El último par que me compré es el número cinco en tres años; y a eso hay que sumarle otros cuatro pares más viejitos pero que de vez en cuando sigo usando. Y eso que no cuento las botas bucaneras que todavía estan esperando un revival de la moda para volver a pisar la vereda, las tengo guardadas desde 1990 más o menos.
Ahora tengo botas marrones y negras, altas y cortas, con taco y bajas, de gamuza y de cuero, con cierre y acordonadas. Y hasta tengo el single de Nancy Sinatra!
Y el sábado no pude resistir la tentación y me compré unas botas lindísimas para usar con polleras. Son de caña bien alta, ajustaditas a la pierna y con taquito así pinino, son negras y tienen la punta un poquito picuda, pero no demasiado. Son de esas botas clasiconas que no pasan de moda y estoy hiperfeliz (cuando venga el resumen de la tajeta de crédito se me va a pasar bastante la felicidad, pero bue, sarna con gusto...).

Lo malo fue que en la misma zapatería había unas botas de montar combinadas en marron y negro primorosísimas.
Lo bueno es que como no tengo caballo no pienso ahorrar para comprarlas.

Por ahora...

1 comentario:

Anónimo dijo...

tambien tengo esa debilidad por botas o zapatos. es lo mismo. al igual que las carteras. te digo que las bucaneras asi se las vi puestas a alguien en la tele y quedan tan lindas!