miércoles, 24 de octubre de 2007

un día en la vida de la ex de mi ex

Por esas cosas raras de la vida, la ex de mi ex (al cual extraño horrores constantemente) está trabajando conmigo esta semana. Obviamente ella desconoce mi condición de ex de su ex, como también desconoce que mi ex la sigue amando como el primer día, y ese fue justamente el motivo de nuestra ruptura.
Al principio la idea me atormentaba, como se hace para compartir ocho horas laborales con la persona a la cual la persona que extrañas tanto extraña tanto?
Me enfermaba de solo pensarlo, pero bueno, tal vez porque lo supe con anticipación y de algún modo me preparé, cuando llegó el día fue mucho menos grave de lo que pensaba.
De todas maneras, no puedo dejar de observarla, como si de esa manera pudiera descubrir algún secreto, alguna receta, algo que me explique porqué, al menos para mi ex, ella es tan especial.
Desde que sé de su existencia, no paré de psicopatearme y sentirme la ultima mujer, la mas tonta e insignificante que existe. Mi autoestima, lamentablemente, quedó en el sótano, con los topos.
Pero ahora entiendo todo. Ella es, como decirlo, una chica normal. Bonita de cara, con una altura considerable, delgada, morocha, ojos oscuros y buen sentido del humor.
Llega a la mañana y mientras prepara unos mates lee el diario y comenta las noticias con sus compañeros. Trabaja muy responsablemente, motivo por el cual sus jefes no tienen reparos en su conducta. Es buena compañera y buena jefa. Al mediodía sale a comer con amigas o con su papá si es que pasa a visitarla. A la salida compra cremas en Farmacity, pasa por el super, va a su clase de pilates y espera a su novio con la cena o se encuentra con amigas a cenar, como un ritual de cada semana.
Se ríe fácilmente, gesticula con las manos, se muerde el labio, es ni más ni menos que una persona simple. No es la típica minita preocupada por tener las uñas pintadas o estar impecablemente vestida. Tiene una femineidad sutil, y a los hombres le agrada porque de a ratos, parece ser uno de ellos. Está llena de amigos. Y trata bien a todo el mundo.
No sé si es desilusión por haberlo descubierto o que, pero ahora que la conozco no duele tanto su existencia. Entiendo. Conociendo a mi ex veo que ella es ni más ni menos que la persona perfecta para él. Aunque ella no lo sepa, aunque no le interese. Aunque yo la siga odiando. Aunque yo lo siga amando tanto.

maria
no se lo que quiero

No hay comentarios.: