miércoles, 29 de noviembre de 2006

vida




"la vida es más fuerte que la muerte"

gapingvoid.com




Estoy atontada.
No puedo despertame y no se cómo traducirlo a palabras.

S. es la mamá de M., un compañero de escuela de mi hija.
S. tiene 37 (como yo) y M. tiene 10 (como Ailén).
El sábado M. encontró a su mamá "descompuesta" y tirada al lado de la cama.
La descompostura era un derrame cerebral provocado por un aneurisma. Aparentemente ocurrió durante la madrugada, M. la encontró después del mediodía.
El lunes la operaron pero no pudieron limpiar toda la zona afectada.
S. está en coma profundo.
Nadie sabe si va a conseguir despertarse.
Nadie sabe qué secuelas podrían quedar si se despierta.

A la hora de la salida de la escuela nos reunimos con ojos de susto mientras esperábamos a los chicos. Nos mirábamos sin saber qué decir, qué pensar. Una de las madres escupía las palabras con bronca, con odio, como queriendo sacarse la furia. Otra de las madres lloraba lágrimas gordas y silenciosas. La más fervorosa repetía letanías acerca de la fe y la oración y pensar mucho y rezar y pedir consuelo. Cuando volví a casa me dí cuenta que me había comido todas las uñas como hace años que no hacía.

S. es tan linda, tan amable, tan dedicada, sola con M. para todos lados, con tiempo para sus sobrinos, con paciencia pra explicar, con una sonrisa para saludar.
Por qué? Por qué?
No es justo.
No es justo.
No es justo.
No.
NO

La vida TIENE que ser más fuerte que la muerte.
La vida DEBE ser más fuerte que la muerte.
Por favor.
Por favor.

Por favor.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Uy... estas cosas te dejan sin palabras. Estas cosas son una mierda, una mierda que sucedan... no deberían suceder.
Sin conocer a S. ni a M. les deseo lo mejor, un blogger en el espacio que no las conoce desea lo mejor para ellas.

mE! dijo...

Escalofrío, y palabras de impotecia.
Fé y oración.

Una desconocida, a la distancia, desea a quienes deja despiertos, compañía, y a quien cayó en ese profundo sueño, lo que sea mejor para ella, y para los demás.